La empresa ArmBionics ha desarrollado nuevas prótesis en Armenia a través de tecnologías innovadoras que pretenden resolver el problema de la rehabilitación física. Su objetivo es crear y producir prótesis para discapacitados y amputados.
Muchos jóvenes perdieron sus extremidades en la guerra de 2020 en Karabaj, y la necesidad de estos implantes creció.
Algunos armenios de la diáspora son voluntarios en la empresa. Gabriela Mullukian, una ingeniera eléctrica uruguaya de 29 años, está estudiando las señales y cómo traducirlas a movimientos eléctricos, para que luego muevan los dedos de la mano.
Manvel Grigoryan, de 24 años, esboza los modelos de diferentes productos. Ha diseñado una mano mecánica que puede abrirse y cerrarse. La mano mioeléctrica es un producto que permite varios movimientos gracias a los sensores de su superficie.
Hayk Kisadur, ingeniero mecánico de Alemania, dice que su participación en el proyecto es importante tanto para perfeccionar sus habilidades como para las perspectivas de trasladarse a Ereván.
Marina Devtyan, directora general y cofundadora de ArmBionics, es una estudiante de medicina de 22 años de Ereván, especializada en neurociencias. Dice que la empresa también está preparando diseños para desarrollar modelos de piernas y que, quizá más adelante, podrían trabajar en manos robóticas inteligentes para la cocina.
Consulte el vídeo completo en 1lurer.am.
Muchos jóvenes perdieron sus extremidades en la guerra de 2020 en Karabaj, y la necesidad de estos implantes creció.
Algunos armenios de la diáspora son voluntarios en la empresa. Gabriela Mullukian, una ingeniera eléctrica uruguaya de 29 años, está estudiando las señales y cómo traducirlas a movimientos eléctricos, para que luego muevan los dedos de la mano.
Manvel Grigoryan, de 24 años, esboza los modelos de diferentes productos. Ha diseñado una mano mecánica que puede abrirse y cerrarse. La mano mioeléctrica es un producto que permite varios movimientos gracias a los sensores de su superficie.
Hayk Kisadur, ingeniero mecánico de Alemania, dice que su participación en el proyecto es importante tanto para perfeccionar sus habilidades como para las perspectivas de trasladarse a Ereván.
Marina Devtyan, directora general y cofundadora de ArmBionics, es una estudiante de medicina de 22 años de Ereván, especializada en neurociencias. Dice que la empresa también está preparando diseños para desarrollar modelos de piernas y que, quizá más adelante, podrían trabajar en manos robóticas inteligentes para la cocina.
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