Se cree que el actual conflicto entre Rusia y Ucrania probablemente terminará sin una confrontación militar, ya que los rusos evitarían un enfrentamiento con la OTAN. El presidente ucraniano Zelensky pidió al presidente Biden que "bajara el tono" de las conversaciones sobre la invasión, tras el anuncio de este último de enviar tropas a Europa del Este (ver aquí).
Al igual que el canciller alemán Scholz y el presidente francés Macron, el presidente ucraniano Zelensky es consciente de los efectos desastrosos que podría significar una guerra sin cuartel en Europa. Todo el conflicto y los temores por una guerra parecen un comportamiento quijotesco por parte de los Estados Unidos.
La operación militar más oportuna contra Ucrania habría sido hace un año, durante la transición de la administración estadounidense. Los rusos perdieron esa oportunidad, de la que se benefició la coalición turco-azerí al lanzar la guerra de 44 días contra Artsaj-Armenia.
Por otra parte, las declaraciones de la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, M. Zakarova, demuestran que la parte rusa está perdiendo la paciencia con Aliyev por su postura pro-ucraniana, además de sus ambiciones respecto a Artsaj.
¿Qué podrían hacer los rusos ante la situación en la que se encuentran?
- Reforzar los lazos con la vecina China, Irán e India a través de fuertes relaciones económicas y militares, especialmente con Irán y China que son sancionados por Occidente.
- Controlar el suministro de energía a Europa utilizando las temperaturas gélidas como herramienta para presionar a los elementos europeos de la OTAN, tal y como hicieron los rusos contra los ejércitos de Napoleón y Hitler.
- Desarrollar todavía más los sentimientos culturales de las naciones eslavas para crear un desorden entre los países miembros de la OTAN de Europa del Este.
- Aprovechando los reclamos de la población kurda en Turquía, Rusia puede evitar el envolvimiento en el frente caucásico -su puerta sur- y acceder a las "aguas cálidas del Mediterráneo".
En cuanto a las oportunidades perdidas, los rusos perdieron una de oro en la segunda guerra de Artsaj. Podrían haber mediado y detenido la guerra antes y haber enviado a Artsaj un mayor número de sus fuerzas de mantenimiento de la paz. Además, podrían haber reforzado su posición en la zona abriendo un enlace fronterizo directo con Irán a través de Artsaj. La parte rusa va a pagar muy caro estas oportunidades perdidas.
La historia nos dice que una de las principales virtudes en la política rusa es la paciencia. Sin embargo, es imprevisible cuándo pueden surgir las próximas oportunidades de este tipo.
Para los armenios, la paciencia, la reevaluación y el estado de alerta son componentes importantes, a la espera de que surja la oportunidad perfecta para liberar Artsaj, incluidos Shushi, Hadrut y otros territorios, parecido a la oportunidad que aprovecharon los armenios durante la primera guerra de Artsaj, que ayudó a liberar inicialmente Artsaj de las manos azeríes.
Krikor Kradjian
Líbano
Enero de 2022
Una respuesta
Where there is a will, there is a way.