Después de Kreim, los antoninos armenios construyeron el monasterio de San Antonio de Padua en Gazir en el promontorio de Beit-Khochbao. La construcción comenzó en 1753, en lo alto de una pendiente empinada que domina toda la bahía de Jounie. La sede del Abad General de la Orden Antonina de Armenia, ahora es la sede de la Orden Libanesa Maronita, pero conserva sus inscripciones armenias talladas en su piedra.
Beit-Khochbao en siríaco significa el lugar de meditación y tranquilidad, lo que revela la existencia de un santuario anterior. Esta es una constante en el Líbano, donde los promontorios se han utilizado como lugares sagrados desde la antigüedad.
Por su ubicación y su arquitectura, el monasterio de Saint-Antoine-de-Padoue es mucho más imponente que el de Saint-Sauveur. Su iglesia, añadida en 1820, es monumental y sus edificios tienen un aspecto defensivo. Como en Kreim, su patio está cerrado por todos lados, no gozando de la vista al mar, lo que le da un aspecto aún más militar.
